La duda estaba ahora en que equipos usar, así que decidí llevar un equipo ligero formado por caña 2,40 acción 10-30 y otro equipo medio compuesto por caña de 3,00 y acción 20-80, montadas con carretes Daiwa Legalis 4000HA y Shimano Exage 4000FD
Mis primeras capturas fueron peces Ballesta de hasta 3kg de peso que ofrecían duras peleas...además de dejar los señuelos hechos trizas con su potente dentadura. Para ello usé Bucktails de poco gramaje y pequeño anzuelo, ya que aunque mordían con gran insistencia los señuelos, no era tarea fácil su captura debido a su pequeña boca.
Probando diferentes lugares un compañero me comentó que había un lugar en el cual se daban buenas capturas. Después de caminar por los pedreros llegué a dicho lugar y con el agua hasta las rodillas decido lanzar un Bucktail Rivas Peón de 15gr...Tan sólo hizo falta un lance y un par de vueltas de manivela para que la caña comenzara a doblar...Fuertes sacudidas y alguna carrera potente delataron al primer Pargo que capturaba a medias aguas y que tras unos minutos de pelea se entregó para la foto.
Sin embargo otras especies, aunque menos combativas por su tamaño, me hicieron pasar buenas jornadas ya que su voracidad era insaciable. Pequeños Meros, Falsos Ábades y Vacas Serranas eran el pan de cada día ya que no fue relativamente complicado sacar varias de estas especies en un mismo día. La única pega que surgió fue que al ser sus zonas de hábitat y caza los fondos pedregosos al verse atrapados tiraban hacia sus refugios para, en más de una ocasión, enrocarse y partir algún que otro bajo...con la consiguiente pérdida del señuelo...
Pasados unos días por fin se presentó el ansiado momento. Amanecíó totalmente cubierto de una densa niebla. El mar estaba totalmente en calma y a simple vista no se apreciaba actividad alguna. Decido lanzar lo más lejos posible un Bucktail Mylar Violeta de 10gr y nada más caer al agua veo una enorme explosión cuando la caña comienza a arquear...Todavía no tengo bien claro que es lo que se encontraba al otro lado de la línea mientras forcejeaba con el animal que alocadamente sacaba línea del Exage con interminables carreras hasta que, tras unos minutos de dura pelea , la silueta de una enorme barracuda se dejaba ver a lo lejos hasta que poco a poco la fui aproximando hacia la orilla...
Ya tenía en seco uno de mis mayores retos conseguidos hasta la fecha Después de este magnífico ejemplar salieron unos cuantos más cada vez más grandes...de hasta 6kg de peso. Cabe destacar que aunque su mordida no es muy potente, sus dientes y su velocidad al atacar los señuelos harían estremecer a cualquier presa que estuviera a su alcance...
Una vez devueltas al agua decido cambiar de señuelo y atar un Jig de 20gr tipo Kabura de mi invención al que aún no había tenido la ocasión de estrenar con ningún depredador y cual fue mi sorpresa, cuando después de unos lances con pequeños tirones por el fondo otro buen Pargo atacaba con confianza el pequeño "pulpo". Tras unos lances más y alternando la recogida otra Barracuda probaba el cefalópodo artificial para posteriormente posar ambos para la foto.
Durante unos días no pude salir a pescar a ciertas zonas debido a fuertes rachas de viento de Levante así que buscando cobijo a sotavento Pargos, Peces Ballesta y algunos pequeños Meros fueron los protagonistas de las tardes de este maravilloso final de verano que, difícilmente, volveré a disfrutar...
¡Saludos y buena pesca con Bucktail Rivas!